Caracterización del suroriente Colombiano, una radiografía de la región.

La Regional
Suroriente Colombiano, está conformada por los departamentos del Meta, Vichada,
Vaupés, Guainía, Guaviare y Amazonas; los que cuentan con una extensión total
de
Se tiene estimado,
según las proyecciones del censo 2010, que a lo largo de la extensión de estos
departamentos, habita una población aproximada de 1.305.957 personas; menos del
3% de la población total del país, muchos han migrado desde otras zonas, pero
en su gran mayoría son personas nativas, oriundos de su territorio. Oficialmente,
existe un pobre reconocimiento de la población indígena; y organizaciones que actúan en la zona, tienen
estimado que existan cerca de 70 comunidades indígenas; entre los más destacados los Nukak Maku y Miriti-Paraná.
La cifra de
desplazamiento forzado es igualmente elevada, especialmente en los
departamentos del Guaviare y Caquetá y la migración de los mismos, se
intensifica hacia el departamento del Meta; donde Según el informe “Tendencias
globales
La presencia y
operación de grupos al margen de la ley, es un indicador que llama mucho la
atención, y especialmente, porque uno de los primeros territorios en los que
históricamente se negoció el fin del conflicto y actividades bélicas, fueron
los llanos orientales; lo que le dio a la región una esperanza de paz duradera.
No obstante fuerzas paramilitares y guerrilleras décadas más tarde, aún actúan
y toman fuerza en sus actuaciones bélicas y terroristas.
Por tratarse de
departamentos muy ricos en recursos naturales, ha sido un foco permanente para
la explotación minera y agroindustrial, petroleras, madereras, monocultivos, entre
otras; y frente a todas estas dificultades, la presencia del estado, que
bastante insuficiente, deja rezagar el desarrollo de las zonas más complejas de
la región.
En medio, las
comunidades rurales, campesinas e indígenas que buscan ser representadas, y
tenidas en cuenta para la reparación, verdadera inclusión en planes de
desarrollo rural y exigibilidad de derechos humanos. Necesita de la buena
voluntad y el trabajo de todos. La pastoral social acompaña a estas
comunidades, y busca en el marco de su incidencia, velar por las necesidades de
los más desfavorecidos.